Este gallo-veleta de la Basílica de San Isidoro fue instalado en la torre en el siglo XI como veleta, aunque ahora está en el Museo. Se sabe, por la prueba del carbono 14 que es de la época de Mahoma (siglo VI-VII) y que vino del Golfo de
Persia ya que se detectaron granos de polen y tierra que proceden de Oriente, quizá de la zona de Irán y además se descubrimiento
fueron unas letras árabes difíciles de descifrar de
aquella localización. En sus ojos había antiguamente piedras preciosas, pero han desaparecido.
Es una veleta muy especial, ya que se sabía que el rey persa Kosroes II, que conquistó los Santos Lugares en el siglo VII ordenó que todas las cruces en las Iglesias se cambiaran por gallos dorados como emblema del rey. ¿Cómo pudo llegar a León? Hay varias teorías, quizá como regalo del califa de Bagdag al de Córdoba y como los leoneses saquearon córdoba en el año 1008 pues se lo quedaron como botín. O quizá llegó a través de algún cruzado o pago por algún prisionero...
María y Yasmina 2º ESO
Nunca fui a León, tengo ganas de ir.Parece interesante la historia de este gallo_veleta que es una veleta muy antigua situado en la Basílica de San Isidoro, aunque ahora está dentro protegida. Me sorprende que averiguaran que el gallo viene de Irán y de la época de Mahoma, solo analizando un poco de polen.Y tambien me sorprende que este en tan buen estado con lo antiguo que es.
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ResponderEliminarEs curioso pensar como el gallo de San Isidoro pudo llegar desde oriente hasta León,con sus grandes dimensiones; también que nunca haya sido destruido por los cristianos.
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